003. LA CARGA DE LOS MENOS PROTEGIDOS

APERITIVO: pa, que luego no anden diciendo que hace uno la faena a "toro pasado", hoy nos vamos a adelantar a las celebraciones de un aniversario más, el 21 de marzo, del nacimiento de uno de los hijos más ilustres que haya parido este país maravilloso; el inmenso indio de Guelatao, don Benito Juárez.

DE BOTANA: seguramente, como es uso y costumbre, habrá discursos de a madre y porras al por mayor. Sin embargo, este año deberían darse pronunciamientos definitivos y contundentes dadas las circunstancias que rodean el aniversario. Por principio de cuentas, hacer acto de fe de nuestra política exterior con su núcleo central: la no intervención, la no injerencia, la autodeterminación;

ENTREMÉS: frenar en seco a toda la clerecía reaccionaria que anda por estos días engallada al extremo. Como se sabe, el imperialismo merodea desde hace tiempo nuestro territorio. Espera el momento oportuno (¿el homicidio de su agente aduanal?) para dar el zarpazo definitivo e invadir nuestro país de una vez por todas.

ENTRE SEMANA: ¡Qué mejor oportunidad que a la sombra del Benemérito se recuerden nuestros principios meridianos! Este aniversario debe ser una contundente respuesta a tanto obispo, cardenal y demás pájaros de la misma especie que andan desgañitándose, señalando furibundos la paja en el ojo ajeno.

DESEMPANCE: siempre llevando agua al molino del PAN y al suyo propio, aunque como buenos sepulcros blanqueados, insistan e insistan en que no se meten en política terrenal, porque sus "curules" las tienen en el cielo. Entonces el PAN debe ser un partido de angelitos y vírgenes pudibundas. Hipocresía y manipulación quintaesenciadas, pues.

UN VEJIGAZO: afortunadamente, los mismos panistas se han encargado de vacunarnos contra la mochería por sus excesos y avaricia. El catolicismo que priva entre las filas blanquiazules es epidérmico, emocional, basado en la ignorancia propiciada por quienes no están interesados en la profundización del conocimiento religioso, en la historia de tanta aberración.

UNA CAMPECHANA: mas lo que realmente importa ahora es la otra faceta de la celebración juarista; la defensa de nuestra línea internacional. Desgraciadamente, la defensa de la patria es muy endeble mientras no se fortalezca el frente interno, principalmente en lo económico.

UN HIDALGO: y es que la deuda, la dependencia, la conversión de nuestro país en una maquiladora y la apertura total a la inversión extranjera incluso ya hasta en la explotación petrolera, son flancos débiles que nos hacen vulnerables a las presiones. Son heridas por las que sangramos profusamente. Hemorragia por donde se nos va media vida, porque como dice la canción: "El dinero no es la vida, es tan sólo la mitad".

LA DEL ESTRIBO: estamos ante un paso hacia el despeñadero. Ante una política económica que insiste en la restauración de la confianza de los capitalistas, los grandotes, poniéndoles en bandeja de plata las riendas de la economía nacional y devolviéndoles sus privilegios.

LA CAMINERA: y, a pesar de tanto arrumaco por parte del gobierno, los gordos burgueses siguen apostando al PRI para presionar al PAN (y viceversa), siguen copando al gobierno mientras ellos alegremente se dedican a hacer negocio tras negocio y los mexican@s nos hundimos más y más en la miseria.

LA PENÚLTIMA: qué tanto habrá aumentado la capacidad de chantaje, que ni a los tortilleros puede (o no quiere) meter en cintura el gobierno. Los comerciantes anuncian más carestía. Ya ni permiso piden estos gandallas, total, los consumidores son los que tienen que apechugar.

LA ÚLTIMA Y NOS VAMOS: y entre tanto, el salario se hace agua. Los alimentos huyen de las mesas de las grandes mayorías de familias mexicanas. ¿Estaría de acuerdo don Benito, el grande, con esta cáfila de neoliberales que dicen gobernarnos?

OTRA UNA: pero el fortalecimiento del frente interno no podrá darse mientras el gobierno persista en desconfiar de los trabajadores, de su pueblo, de las fuerzas democráticas que sí están interesadas, aún, en defender la independencia y autonomía de nuestro país.

OTRA MÁS: como dirían los clásicos: "en otro orden de cosas", un alcalde que trabaja en casa de cristal, que no tiene recámaras mentales para con sus conciudadanos, que da la frente y no la espalda; habla claro con la gente, sin arrogancia pero tampoco con miedo porque jamás le irán a preguntar por los dineros públicos si ven que se han derivado hacia el bien colectivo.

DE LA CASA: es el caso del alcalde de Tuxtla Gutiérrez, Yassir Vázquez, del que algunos insisten en que no es político. Tal vez, pero de cierto actúa de tal forma, que muchos que presumen de serlo debieran imitarlo, a efecto de buscar y encontrar la forma de crear armonía en la sociedad y aligerar la carga de los menos protegidos a los que, si un gobernante quiere serlo de verdad, ha de entregarse en forma prioritaria. Yassir Vázquez nos demuestra cada día, que quiere ser un gobernante de verdad. Bueno, eso digo yo.